Este imperdible trekking comienza en la base de los Montes Martial, en plena Cordillera de los Andes, donde en invierno funciona el centro invernal del Martial. 

Allí inicia nuestra aventura por una senda que transita eternos bosques nativos y bordea un arroyo de deshielo que desciende del mismo glaciar, mientras aprendemos sobre el paisaje, su fauna y geografía.

Después de una hora de ascenso, repentinamente el paisaje empieza a transformarse: los árboles se vuelven más enanos y el clima más frío nos indica que, a 600 metros sobre el nivel del mar, estamos ingresando al ambiente de alta montaña. 

Dejamos  atrás el límite de vegetación, y luego de disfrutar de un hermoso ambiente andino, se nos presenta la parte desafiante del camino. En este sector predominan los musgos, líquenes y solo algunas aves que se adaptan a este ambiente.

Nos tomamos un pequeño descanso para apreciar las vistas desde el lugar y emprendemos el último ascenso para llegar al final del sendero. En este punto sentimos la majestuosidad del Glaciar Martial y las montañas que nos rodean. 

Caminamos por la zona buscando los mejores lugares para las fotos y recargamos energías antes de comenzar el descenso a la base.

Este imperdible trekking comienza en la base de los Montes Martial, en plena Cordillera de los Andes, donde en invierno funciona el centro invernal del Martial. 

Allí inicia nuestra aventura por una senda que transita eternos bosques nativos y bordea un arroyo de deshielo que desciende del mismo glaciar, mientras aprendemos sobre el paisaje, su fauna y geografía.

Después de una hora de ascenso, repentinamente el paisaje empieza a transformarse: los árboles se vuelven más enanos y el clima más frío nos indica que, a 600 metros sobre el nivel del mar, estamos ingresando al ambiente de alta montaña. 

Dejamos  atrás el límite de vegetación, y luego de disfrutar de un hermoso ambiente andino, se nos presenta la parte desafiante del camino. En este sector predominan los musgos, líquenes y solo algunas aves que se adaptan a este ambiente.

Nos tomamos un pequeño descanso para apreciar las vistas desde el lugar y emprendemos el último ascenso para llegar al final del sendero. En este punto sentimos la majestuosidad del Glaciar Martial y las montañas que nos rodean. 

Caminamos por la zona buscando los mejores lugares para las fotos y recargamos energías antes de comenzar el descenso a la base.